Después de muchos intentos infructuosos, la creación de este blog ya no se podía demorar más.
Ayer la no-tan-joven padawan le tuvo que discutir al maestro el eterno lema: "la diferencia entre un jogger y un runner es un dorsal". No lo es. El dorsal 559 que llevaba prendido en la camiseta no fue suficiente para ignorar el dolor que subía desde el tobillo a la rodilla cada vez que apoyaba el pie. A un verdadero runner le hubiese dado igual. Así que terminé en última posición, corriendo a mi habitual ritmo jogger. El hecho de que sólo fuésemos 2 en la categoría senior y eso me hiciese subir al segundo escalón del podio es meramente anecdótico. Aunque el trofeo queda bien al lado de la tele :)
Lo mejor de mi primer "día en las carreras":
- Pasar entre el público a cada vuelta. Es impresionante la reinyección de fuerzas que unas niñas pueden meter al grito de: "¡Venga equipo rosa!".
- Llegar de última y tener la calle principal del pueblo cortada única y exclusivamente para que yo trotase por allí durante sus buenos 5 minutos.
- Ver la cara de satisfacción de un runner purista (y maratoniano), recién salido de los infiernos de Aquiles, volviendo a quemar zapatillas.
En contra de la opinión generalizada que ronda por La Estrella 3 (indigentes aprovechados incluidos), no me veo en ningún Mapoma, a no ser de animadora enfervorecida, pero sí podría acostumbrarme al ambiente de las pequeñas populares. Mejor aún cuando abandone mi condición de colibrí con 177 ppm de media. Por el momento seguiré dando vueltas por mi caminito y ejerciendo de Pepito Grillo cuando sea necesario.
Siento que la primera entrada sea un poco monólogo runner pero tan fermosa fazaña se lo merecía.
En definitiva: Bienvenidos al blog del Equipo Rosa :D